Dos almas
Hace 4 meses no la tenía para mí, hace 4 meses no nos sentíamos. En su cuarto, media noche. Antes de desnudarla me acerque lentamente y la abrace. Podía sentir como su corazón se aceleraba y hablaba con el mío. - extrañaba tenerte tan cerca- le susurré al oído y pude sentir como su piel se erizaba debajo de mis dedos. Con mis manos en sus caderas dibujé media sonrisa en su rostro y procedí a besarla. Con mucha calma y un suave movimiento le levanté la camiseta larga y pude notar que no llevaba nada mas, todo su perfecto cuerpo quedó al descubierto...para mí. Ella coloco sus manos en mi pantalón y de un jalón ambos ya estábamos tumbado en su cama sin ropa. El calor de su cuerpo aumentaba con el mío. Con mis manos fui separando sus piernas y con un movimiento leve entre, y las puertas de su cuerpo estaban tan húmedas, su interior tan cálido. No me moví, no se movió. Nos quedamos así, abrazados. - extrañaba tanto esto - dijo mientras suspiraba. La besé y comencé a moverme con delicadeza, pero rápido; entre embestidas, suspiros y gemidos la hice mía. Me pedía que no parara, que me amaba, que no me fuera nunca, que la hiciera mía, ella es mi reina y mi ser es su trono. Besando sus muslos hasta llegar...lamidos, suspiros, apretones, - hazme tuya por favor - yo abajo, ella arriba entre movimientos apresurados, terminamos. - te amo...



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